Por Nicolás Marchiori.
Ante un estado de agotamiento emocional que atraviesan los argentinos por acción directa de una clase política desconectada de la realidad, en Misiones ocurre lo contrario. La energía positiva y la empatía de los gobernantes con el pueblo han generado una fuerza arrolladora que logró neutralizar los efectos devastadores de la polarización en la sociedad.
Cuando hablamos de polarización nos estamos refiriendo a un fenómeno social vinculado a grupos humanos subsumidos en un espiral de reproches y acusaciones que indefectiblemente conducen a graves conflictos. Generalmente proviene de una situación anterior no resuelta. Una sociedad polarizada tiende a estar menos cohesionada y consiguientemente a sufrir mayor inestabilidad entre la convulsión y violencia permanente.
El país atraviesa por tiempos en donde la desafección política se ha transformado en un problema grave para la vida democrática. El fenómeno socio-político de la “grieta” ha generado un duro golpe para una sociedad cada vez más polarizada por visiones radicalizadas. La desafección no tiene que ver con el descontento, es algo más profundo. El consultor político mexicano Javier Sánchez Galicia sostiene que el descontento supone la insatisfacción por los rendimientos negativos de un sistema o de sus dirigentes ante su incapacidad de resolver problemas básicos. El descontento no suele afectar la legitimidad democrática y es, sobre todo, coyuntural. En cambio, la desafección política implica una profunda insatisfacción con los resultados de las instituciones democráticas, independientemente del partido o individuos que las estén operando. Esto se traduce en ausencia de pertenencia, disgusto, falta de representación, desconfianza y rechazo a los partidos políticos.
En términos baumeanos, esta situación va produciendo “la corrosión y la lenta desintegración” de un elemento central, no sólo en las efectivas formas de integración, sino en las esperanzas colectivas, como es el “concepto de ciudadanía”.
La desafección política incide, sobre todo, a los nuevos electores: jóvenes, informados, críticos y conectados (millennials). Este segmento del electorado es el que componen el voto volátil y definen una elección. Son lo que adoptan una actitud antipolítica y presentan dos posturas: no acuden a votar porque no creen en el sistema de partidos, o votan para ver perder al partido en el gobierno.
El disenso social se encuentra dominado por los temas, los motivos y las estrategias de la política. Las redes sociales se han convertido en un “teatro de operaciones” y principal proveedor de los mecanismos para el disenso violento o agresivo en el escenario público. Las situaciones de disenso se expanden a través de operaciones coordinadas por minorías amplificadas que operan en los entornos digitales, utilizándolos a estos como el ambiente propicio para la canalización y la materialización de la violencia simbólica o de la agresividad social.
Lo cierto es que producto de la grieta, el escenario político de la Argentina ha derivado en la aparición de un sistema “bicoalicionista” de partidos que representan ideologías cada vez más radicalizadas. Esta visión binaria de la política ha dado lugar a la aparición de los movimientos provincialistas que toman distancia de esa lógica amigo/enemigo, anti/a favor, y se viene observando el crecimiento de terceras fuerzas con una fuerte impronta de defensa de lo local con enérgico apoyo de un sector cada vez más grande de la sociedad que escapa a la visión sesgada y extremista que plantea la grieta.
Lo que sucede en la provincia de Misiones es ejemplo para el país, se trata de un caso exitoso de impermeabilidad ante “la grieta”. La Renovación ha construido inteligentemente su propio frame, que le ha permitido tomar distancia de las disputas que se dan en el ámbito nacional: el Misionerismo. Es indefectible su asociación con toda acción tendiente a defender, luchar, cuidar o reivindicar en nombre de Misiones y los misioneros. Lo nacional es la otredad, luce como algo ajeno a los misioneros. “La Nación no nos mira” es una frase que pone en relieve una situación que padecen las provincias argentinas, no sólo Misiones, y que tiene que ver con la ausencia de federalismo, un término que ha pasado a ser letra muerta en la Carta Magna ya que en la práctica no se existe. Ejemplos para demostrarlo hay miles, pero es un tema que requiere ser tratado aparte.
El Misionerismo tiene un combustible que lo transforma en una fuerza contagiosa y arrolladora: el pensamiento positivo, la buena vibra. Para dimensionar la importancia de la buena vibra es necesario acudir a Bruce Tainio, este biólogo realizó un estudio de la frecuencia vibratoria del cuerpo humano y llegó a la conclusión de que un cuerpo que se encuentra sano tiene una frecuencia vibratoria durante el día de 62 a 72 MHz (unidad de medida de la frecuencia de las ondas) y que cuando esta misma se reduce en una persona, su sistema inmunológico se ve comprometido. Por ende, se puede inferir que a mayor conciencia de estas frecuencias vibratorias en el Universo y en el cuerpo, uno puede alcanzar un estado superior de bienestar e incluso mejorar la calidad de vida.
Las buenas vibras se traducen en optimismo. De ahí su importancia, pues los optimistas siempre buscan soluciones en vez de quedarse en la queja. Si bien es cierto que todos los equipos de trabajo enfrentan dificultades, no todo el mundo responde de la misma manera. Frente a una grieta que genera un clima de desánimo y hartazgo, el equipo misionerista ha demostrado que siempre se enfoca en la búsqueda de soluciones y en el trabajo colaborativo para la resolución de los problemas. Este factor es fundamental en cualquier equipo porque los vuelve más resilientes y los prepara de la mejor para afrontar situaciones inesperadas o desfavorables con resultados positivos. Son varios los ejemplos en el caso de Misiones, ejemplos que permiten resaltar el enorme espíritu perseverante de la dirigencia renovadora. Ahora, la pregunta que nos hacemos es: ¿Hubiesen sido posibles todos los logros alcanzados si la dirigencia misionerista se dejaba arrastrar por la dinámica de la grieta? Pensamos que no. Enhorabuena, la visión política que impulsa el proyecto misionerista pone en el centro de todo al misionero, quien constituye su razón de ser.
Seguir creciendo
El pasado 23 de marzo se inició formalmente la campaña electoral rumbo a los comicios del 7 de mayo. En la reciente inauguración de Silicon Misiones, el parque tecnológico más importante de la región, el Ing. Carlos Rovira dejó en claro que “nuestro norte siempre es la sociedad, es lo que piensa la sociedad, desea la sociedad y bueno, este es un examen que se va rindiendo todos los días. Pero sin olvidar también que todos los roles en un proyecto político son importantes, por eso yo celebro la cuota de amplitud, de apertura, de caras nuevas de todo lo que van a llevar adelante en esta versión la oferta electoral del Frente Renovador de la Concordia”.
La Renovación ha conformado una oferta electoral en donde la mitad de sus candidatos nunca antes han hecho política. En su gran mayoría son personas que vienen del sector privado y que han dejado su actividad para brindar sus aportes y nuevas ideas. Este factor fue destacado por Rovira, quien consideró que “es el camino para volver a fundar una nueva sociedad basada en nuevas posibilidades”.
Cuando los misioneros son consultados acerca de los factores que pesan a la hora de votar, las palabras que más se repiten son certeza y confianza. De esta forma, la percepción de la población es que un gobierno con la impronta con la que viene desplegando la Renovación cada una de sus políticas públicas es el que en mayor medida puede garantizarle un mejor futuro.
De allí radica la contundencia de los números de las diferentes mediciones que se vienen realizando durante este último tiempo en la provincia. La percepción de gran parte de la opinión pública respecto de la Renovación es la de un esquema exitoso que, al contrario de los que se desgastan con el tiempo, se consolida cada vez más y suma constantes adhesiones de diferentes sectores de la ciudadanía.
Una oferta electoral representativa y federal
La semana pasada se conoció la lista de candidatos a diputados provinciales del Frente Renovador de la Concordia. Basta con repasar cada uno de los nombres para confirmar que la oferta cubre toda la geografía provincial con los mejores referentes de cada pueblo, de cada actividad productiva y cada profesión. La conducción de la Renovación hace gala una vez más de esa extraordinaria capacidad para elegir a las mejores personas como candidatos para cada época.
Cuando hablamos del carácter federal de la lista del Proyecto Misionerista se hace necesario nombrar cada uno de los pueblos que han aportado sus mejores referentes: Puerto Iguazú, El Soberbio, Dos Hermanas, Leandro N. Alem, San Javier, Eldorado, Capioví y Posadas.
El sector productivo tendrá su representación en el Parlamento Misionero. Se trata de un actor de gran importancia para el desarrollo y el crecimiento de la provincia y en esta oportunidad los encargados de representarlos serán el referente de la yerba mate Juan José Szychowski y el joven Federico Fachinello, ligado a la industria forestal.
La salud siempre ha siempre ha sido una prioridad para la Renovación y los encargados de enarbolar esta bandera serán nada más y nada menos que el actual gobernador Herrera Ahuad y la pediatra Lilian Tartaglino.
Mens sana in corpore sano, reza el adagio latino. Por lo tanto, si hablamos de la salud y bienestar humano no debemos olvidarnos del deporte. El misionero campeón de automovilismo Rudi Bundziak y la gran referente de las artes marciales Alicia Zalesak serán los representantes del deporte.
En 2018 la paridad de género se convirtió en ley en la provincia. “Más que un derecho es una responsabilidad ganada”, expresó en su oportunidad el Ing. Carlos Rovira.
La voz de las mujeres estará garantizada con las candidatas Anazul Centeno, Silvia Rojas, Carolina Butvilofsky, María Heidy Schierse, Cármen Méndez Asón, Blanca Nuñez, Jorgelina Besold, y Marlenne Abrile.
La Cámara de Representantes se ha convertido en una verdadera “Casa de la Leyes” gracias a la labor incansable de Carlos Rovira, que se ha encargado de garantizar el diálogo democrático y el debate político respetuoso entre los diferentes actores del ámbito legislativo. Su candidatura es una garantía de continuidad de la alta producción legislativa.
También integran la lista de diputados renovadores: Héctor “Kico” Llera, actual legislador con gran trabajo social desplegado durante su paso por la Dirección de Delegaciones Municipales de Posadas y por la Subsecretaría de Acción Social en el Ministerio de Desarrollo Social de la Provincia; José Luis Pastori, profesional de las Ciencias Económicas proveniente de una familia con gran militancia dentro del radicalismo; Alejandro Arnhold, contador público y actual Intendente de Capioví; Enio Lemes, ex intendente de San Javier, y Hugo Benitez, apoderado y referente del Partido UNIR.
* Abogado. Diplomado en Manejo de Crisis y en Análisis de Procesos Electorales. Posgrado de Especialización en Comunicación de Gobierno y Electoral. Becario de la Fundación Konrad Adenauer y del Centro de Análisis y Entrenamiento Político – CAEP (Colombia)