Por Fernando Retamozo*.
Cass Mudde politólogo neerlandés y profesor de políticas en la escuela de asuntos internacionales de la Universidad de Georgia, en Estados Unidos, en su libro “La ultraderecha hoy” busca entender esta nueva corriente política en la actualidad, donde deja en claro que estas vertientes se muestran en contra de la democracia liberal y las divide en dos grupos, uno de ellos denominado extrema derecha, que son los que se oponen a la esencia de la democracia y la otra es la derecha radical, que acepta las reglas de la democracia en teoría, pero se opone a elementos claves de su funcionamiento, como ser el respeto a las minorías o al estado de derecho. Sumado a esto, uno de los problemas fundamentales de la ultraderecha actual es la combinación de populismo, nacionalismo xenófobo y autoritarismo, que reduce todos los problemas a una cuestión de ley, orden y mano dura.
En este orden, Patricia Bullrich parece ejemplificar más claramente lo que hoy denominamos como ultraderecha y lo podemos demostrar con su último spot de “Vamos por todo”, donde principalmente promete represión y que sin ello el país no tiene cambio y tampoco arreglo, lejos de las vías del dialogo o la concordia, es el golpe y el autoritarismo lo que usaría como medio de transformación, imágenes que tuvimos presente hace poco en Jujuy donde Gerardo Morales reprimió ferozmente a docentes.
La suposición de la ex ministra de seguridad de Mauricio Macri y ex ministra de trabajo de Fernando de la Rúa, es que las ideas que quiere implementar generarían tal descontento en la sociedad que solamente podrían ser sostenidas a través del uso de la fuerza monopólica del estado, y que además la sociedad soportaría este tipo de violencia. Tenemos varios recuerdos de propuestas similares y sabemos cómo terminaron.
Una de las iniciativas que esbozó la candidata, es la de arancelar la universidad pública, debido a que solamente se recibían extranjeros, cargado de xenofobia y desconocimiento. Ya que fue desmentida con datos desde la comunidad educativa.
Mientras tanto, su competidor de Juntos por el Cambio, Rodríguez Larreta tiene el mismo programa, pero se diferencia en las formas. Desdibujado en su estrategia política debido a la sobredosis de focusgroup el Jefe de Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires, va en busca de los votos “swiftie” queriendo acercarse a los fans de Taylor Swift con videos poco auténticos y muy forzados, muestra que en la desesperación por ganar la interna ya llegó al fondo de olla.
La Gestión es la Campaña
Por otro lado, Sergio Massa quien apenas hace 5 meses está al frente del ministerio de economía, heredó una situación económica gravísima, continúa inteligentemente sin desenfocarse de la gestión mostrando resultados, como el gran hito de la culminación de uno de los tramos del gasoducto Néstor Kirchner, que significará menos fuga de dólares y más producción y trabajo nacional.
En este marco, el precandidato presidencial visitó Misiones, donde se reunió con los candidatos a Senadores y Diputados nacionales del Frente Renovador de la Concordia, resaltando la gran importancia que le da Massa a su relación con Misiones y con el proyecto renovador en particular.
Siendo la renovación neo su norte a la hora de pensar en políticas públicas que impulsen la economía del conocimiento, así como también la protección del medioambiente y sobre todo la capacidad del modelo misionerista de tener un orden político, que a la vez deriva en un orden económico.
En esta línea, Massa sabe lo que necesita la tierra colorada, ya que es el único precandidato a presidente que constantemente impulsó proyectos que benefician a los misioneros, como es la zona aduanera especial, el puerto de Posadas y las leyes que apoyó desde el Congreso, son muestras del compromiso que tiene con Misiones.
Además, en su discurso del lunes pasado en Iguazú, mencionó que uno de sus objetivos es que la fila de autos que se concentra en el puente Roque González venga a Posadas y no que sea al revés, para que los comercios locales no sufran por las asimetrías de frontera. Quedan aún recuerdos del gobierno macrista cuando dichos desequilibrios devastaron a los comercios del casco céntrico de Posadas, a contramano de lo que se ve ahora, que existe una explosión de consumo, impulsado tanto por posadeños, como por los turistas brasileros y paraguayos.
También a la hora de hablar de intención de voto, Massa encabeza las encuestas en Misiones, marcando una variable que va de los 35 al 42 por ciento, cuestión que se replica y maximiza en los candidatos de Innovación Federal que lo acompañarán en la boleta. Carlos Arce y Daniel “Colo” Vancsik se aproximan al 50%, siendo la propuesta más elegida por el misionero.
En ese sentido, la renovación neo llevará al congreso el mandato misionero, que el Ing. Carlos Rovira lo definió como seguir levantando la voz en defensa de los intereses de la provincia, haciendo de acá para allá, sin seguir mandatos de líderes nacionales, sino encontrando en el trabajador misionero, en el colono de la tierra colorada su único y verdadero mandato.
(*) Politólogo y periodista.